Tras el asesinato de George Floyd, a medida que la atención pública se centraba en asuntos relacionados a la raza y al racismo, muchas escuelas comenzaron a dar clases sobre la raza y el racismo. Algunos estadounidenses han pensado erróneamente que estas clases tienen el objetivo de culpar y castigar a los estudiantes blancos. Culpan a la teoría crítica de la raza. Es importante aclarar que la teoría crítica de la raza no es un componente del currículo estadounidense durante la escuela primaria y secundaria. De hecho, es un conjunto complejo de ideas que suele enseñarse en las escuelas de postgrado. Desafortunadamente, la teoría crítica de la raza erróneamente se considera igual a cualquier lección que aborde la raza o el racismo.
¿Qué es la teoría crítica de la raza?
Aunque los expertos coinciden en que nuestras escuelas, desde primaria hasta secundaria, no enseñan la teoría crítica de la raza, sus ideas subyacentes han influenciado la opinión actual sobre la raza, así que vale la pena entenderlas. La teoría crítica de la raza (enlace en inglés) fue creada para ayudar a explicar la forma en que nuestras leyes y políticas pueden afectar a las personas de distintas razas en diversas formas, incluso cuando dichas leyes o políticas no tienen tal intención. Durante los últimos 50 años, desde el Movimiento por los Derechos Civiles, se han aprobado numerosas leyes nacionales y estatales que prohíben dar un trato distinto a las personas por motivos raciales. Aunque estas leyes fueron diseñadas para crear igualdad de condiciones, las desigualdades raciales persisten: con diferencias marcadas en un sinfín de áreas, las cuales van desde la propiedad de viviendas hasta los salarios. Derrick Bell (enlace en inglés), profesor de derecho en Harvard, contribuyó al desarrollo de la teoría crítica de la raza como una forma de ayudar a los abogados a entender cómo la raza puede seguir influyendo en la experiencia de las personas con sus jefes, prestamistas o gobiernos incluso después de que a dichas instituciones se les haya prohibido tratar de forma distinta a las personas por motivos raciales. Por ejemplo, la teoría crítica de la raza ayudó a explicar la forma en que la política de contratación de una empresa podría ser racialmente neutral tanto en palabra como en naturaleza, pero podría contar con componentes que en la práctica producen discriminación racial.
¿Cuáles son las ideas principales de la teoría crítica de la raza?
Una de las ideas más importantes de la teoría crítica de la raza es que la raza es algo fabricado por la sociedad. En lugar de ver la raza como algo innato en nuestros genes, la teoría crítica de la raza nos ayuda a entender que la raza no se refiere al color de la piel. En realidad, la raza es un conjunto de ideas o suposiciones (enlace en inglés) sobre las personas con base en su color de piel y otros rasgos visibles. Las personas suelen asimilar este tipo de ideas sobre grupos raciales específicos a través de los medios de comunicación, la familia y las clases de la escuela. Debido a lo mucho que se han generalizado estas suposiciones raciales, es muy difícil desechar nuestras ideas preconcebidas sobre la raza. Por ejemplo, se nos enseña con frecuencia que los europeos blancos “descubrieron” América y a las comunidades indígenas que allí vivían desde hace miles de años. Una perspectiva basada en la teoría crítica de la raza cuestionaría el hecho de analizar esta parte de la historia únicamente desde el punto de vista de los colonizadores europeos. Alguien que implemente la teoría crítica de la raza intentaría entender este capítulo de la historia desde distintas perspectivas: tanto de las diversas comunidades indígenas como de los colonizadores europeos. ¿Cómo cambiaría esto nuestra comprensión sobre el “descubrimiento de América”? ¿Cuándo comienza la historia de esta tierra?
La importancia de escuchar distintas voces y entender la manera en que los sistemas han perpetuado la desigualdad puede mejorar nuestra forma de abordar la historia estadounidense.
Sin pensar con mucho detenimiento sobre las comunidades indígenas y sus arraigadas historias y civilizaciones, podemos olvidar con facilidad que estas comunidades fueron despojadas de sus tierras y que no eran personas de naturaleza salvaje que merecían dicho destierro como parte del proceso de “civilizarlas”. La teoría crítica de la raza también nos ayuda a combatir la poderosa idea de que ya no existen los indígenas. Esta idea errónea contribuye a que las personas promuevan la noción de logos y mascotas deportivas ofensivas inspiradas en los indígenas americanos (enlace en inglés) como una forma de rendir tributo al legado guerrero de pueblos que desaparecieron hace mucho tiempo. Este es un ejemplo de la forma en que ideas poderosas, pero incorrectas, sobre la raza pueden causar que nos tratemos unos a otros de forma distinta.
Esto puede ocurrir incluso sin que las personas lo hagan de forma deliberada (enlace en inglés) o por motivos de odio. Además, la diferencia en el trato hacia ciertos grupos puede causar que grupos completos de personas experimenten los mismos espacios y lugares de forma muy distinta. Por ejemplo, existe un estudio de investigación publicado por la Asociación Estadounidense de Psicología (enlace en inglés) que demuestra que los adultos blancos suelen sobrestimar la edad de los niños de color en 4,5 años. Esto puede generar situaciones donde los niños de color son tratados con mayor frecuencia como adultos cuando son abordados por la policía o en el juzgado.
A menudo pensamos en el racismo como personas malas que intencionalmente les hacen cosas malas a los demás debido a su raza. La teoría crítica de la raza reconoce el racismo como un sistema de ideas, comportamientos y políticas que seguirán creando situaciones injustas y desiguales. Si bien muchos de nosotros esperamos que el racismo desaparezca con el tiempo, la teoría crítica de la raza sugiere que el racismo no terminará simplemente eliminando las leyes y políticas racistas. Entonces, en lugar de concentrar demasiada energía en averiguar quién de nosotros es racista, la teoría crítica de la raza analiza cómo funciona el sistema de racismo en diferentes situaciones y qué tenemos que hacer para que desaparezca.
Entendiendo nuestra historia, pasada y presente
Otra característica principal de la teoría crítica de la raza es que no se puede entender del todo nuestra historia sin reconocer la importancia de las distintas voces; sobre todo aquellas que suelen ser silenciadas o ignoradas. Por ejemplo, cuando los inmigrantes irlandeses llegaron a los Estados Unidos a comienzos del siglo XIX, no eran considerados blancos (enlace en inglés) por los estadounidenses de la época. Los irlandeses comenzaron a ser considerados blancos más tarde (en el siglo XX) cuando los estadounidenses blancos los asignaron a puestos para controlar y gobernar en representación suya a otras personas de color. La enseñanza de este tipo de ejemplos históricos es muy poco común en la mayoría de escuelas, pero la teoría crítica de la raza sostiene que estos capítulos olvidados son muy importantes para entender cómo funciona la raza y el racismo, y cómo explican nuestra realidad actual. Aquellos que conocen la teoría crítica de la raza también se interesan en escuchar las voces silenciadas e ignoradas de las personas en la época actual. Por lo tanto, gran parte de su investigación se enfoca en hacer que se oigan las voces de las personas de color, las mujeres, los niños y cualquier grupo de personas cuyas historias hayan sido ignoradas.
¿Cómo puede contribuir la teoría crítica de la raza en el ámbito educativo?
Aunque la teoría crítica de la raza no se enseña en las escuelas primarias y secundarias, sus ideas sí tienen relevancia para las escuelas primarias y secundarias. Por ejemplo, la importancia de escuchar distintas voces y entender la manera en que los sistemas han perpetuado la desigualdad puede mejorar nuestra forma de abordar la historia estadounidense desde la escuela primaria hasta la secundaria. El currículo sobre historia estadounidense suele incluir la esclavitud y el Movimiento por los Derechos Civiles, pero excluye muchos otros capítulos de nuestra historia que enfatizan la forma en que el racismo fundamental ha estado presente en la formación y desarrollo de nuestro país. Una perspectiva fundamentada en la teoría crítica de la raza también puede ayudar a los maestros y administradores a entender su propio papel en perpetuar la desigualdad mediante políticas aparentemente neutrales en términos de raza. En general, la teoría crítica de la raza puede ayudar a los docentes a entender que la meta de convertir a sus estudiantes en la mejor versión de sí mismos será posible al garantizar de forma intencional y constante que nuestras escuelas estén libres de racismo.