“¡Nuestro proyecto será lo máximo!”.

Ese es el tipo de entusiasmo que los padres quieren ver en sus adolescentes (sobre cualquier tema, en realidad, pero sobre todo respecto a las actividades académicas). Tener este tipo de energía no es solo posible, sino que tanto las investigaciones como los simpatizantes del enfoque sugieren que resulta común entre estudiantes de escuela secundaria que han adoptado el aprendizaje basado en proyectos.

Pregúntale a cualquier persona cuáles son los problemas que aquejan actualmente a las escuelas secundarias, y siempre surgirán los mismos temas: los niños se muestran aburridos o desinteresados (enlace en inglés); los estudiantes tienen problemas para relacionar el aprendizaje cotidiano con su futuro (enlace en inglés); los adolescentes no están poniendo en práctica las habilidades fundamentales que necesitarán en el mercado laboral de hoy en día. Cuando se aplica de forma eficaz, el aprendizaje basado en proyectos puede ser la cura para esos tres males.

¿Qué es el aprendizaje basado en proyectos?

En palabras simples, el aprendizaje basado en proyectos es un método de enseñanza en el que los estudiantes aprenden mediante la realización de proyectos. Los estudiantes son participantes activos en su educación al “crear conocimiento” a medida que trabajan, en lugar de limitarse a recibir información de forma pasiva por parte de un maestro, como suele ocurrir en la enseñanza presencial más tradicional. Generalmente, los estudiantes se dedican durante largos períodos de tiempo a resolver problemas desafiantes, relacionados al mundo real y/o que resultan interesantes desde un punto de vista personal. Al inicio de un proyecto, los estudiantes procuran entender a fondo la pregunta en cuestión. Posteriormente, investigan y desarrollan explicaciones y soluciones. Luego, presentan su producto final a una audiencia que puede estar formada por una mezcla de maestros, compañeros y profesionales del mundo real que podrían obtener un auténtico beneficio de los hallazgos, recomendaciones o productos del proyecto. En su forma óptima, el aprendizaje basado en proyectos exige creatividad, liderazgo, habilidades de escucha y comunicación, gestión de proyectos y la capacidad de garantizar una concentración continua al mantenerse “manos a la obra”. Estos proyectos abarcan una amplia gama de áreas, desde conceptos de negocios e investigaciones científicas hasta activismo por la justicia social y exhibiciones de arte.

La importancia del aprendizaje basado en proyectos

Diversos estudios demuestran que el aprendizaje basado en proyectos no es solo popular, sino también efectivo. Un artículo publicado en julio del 2016, Project-based learning: A review of the literature (enlace en inglés), realizado por investigadores de la Universidad de Durham, profundiza en numerosos estudios que demuestran que el modelo de enseñanza resulta efectivo para estudiantes de todas las edades. Por ejemplo, un estudio realizado en 1998 en el Reino Unido, determinó que una mayor cantidad de estudiantes de 9.° a 11.° grado en clases de matemáticas que aplicaban el enfoque basado en proyectos, obtenían el Certificado General de Educación Secundaria (GCSE, por sus siglas en inglés) en comparación a los que estudiaban matemáticas de forma tradicional. Un estudio israelí del 2007 reportó que 60 estudiantes de escuela secundaria que pertenecían a clases con el enfoque basado en proyectos, en el área de programación, robótica y motores eléctricos, mostraron un “considerable aumento” en conocimiento y habilidades tecnológicas en comparación a otros 60 estudiantes de clases que manejaban la instrucción tradicional. En Grecia, un estudio del 2011 concluyó que los estudiantes de escuela primaria que recibían instrucción basada en proyectos adquirían habilidades para trabajar en equipo, motivación y actitudes positivas hacia compañeros de orígenes étnicos distintos, al igual que conocimiento en relación al contenido como tal. Ese mismo año en Taiwán, una investigación realizada a estudiantes mujeres que participaban en clases donde se aplicaban estrategias basadas en proyectos para enseñar ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (conjunto de asignaturas conocidas como STEM, por sus siglas en inglés) determinó que el aprendizaje práctico producía un nivel más alto de interés y satisfacción con las asignaturas. Un estudio del 2014 realizado a estudiantes mujeres de 11.° grado en Omán, quienes estudiaban ciencias ambientales, descubrió que las estudiantes en el grupo que aplicaba el enfoque basado en proyectos superó de forma significativa el desempeño del grupo de control en la Prueba de Conocimiento Ambiental. Un estudio longitudinal sobre el desempeño de estudiantes de escuela secundaria en el área de estudios sociales (enlace en inglés) en un distrito escolar rural al suroeste de los E.E.U.U. determinó que los estudiantes pertenecientes a la clase basada en proyectos “superaban a aquellos compañeros que aprendían de un currículo tradicional, tanto en estudios sociales como en preparación para la universidad y la vida profesional”. Además, un análisis del 2019 (enlace en inglés) sobre el desempeño de 48 estudiantes en Indonesia determinó que el aprendizaje basado en proyectos aumentaba la “creatividad e independencia” de los estudiantes en la escritura de poesía.

Los estudiantes son participantes activos en su educación al “crear conocimiento” a medida que trabajan, en lugar de limitarse a recibir información de forma pasiva por parte de un maestro.

De acuerdo con Joseph Krajcik y Phyllis C. Blumenfeld, autores del capítulo sobre el “Aprendizaje basado en proyectos” del libro The Cambridge Handbook of the Learning Sciences (El manual de Cambridge de las ciencias del aprendizaje), los estudiantes que pertenecían a clases con el enfoque basado en proyectos obtenían mejores calificaciones en la prueba estatal de ciencias de Michigan, en comparación a otros estudiantes que recibían clases tradicionales. Como referencia más reciente, los doctores Krajcik y Barbara Schneider, colaboraron en la realización de un estudio financiado por la Fundación Nacional de Ciencias, titulado Crafting Engaging Science Environments, el cual brindó 12 semanas de aprendizaje basado en proyectos a estudiantes de escuela secundaria en el área de química y física de 10.°, 11.° y 12.° grado. Una evaluación externa determinó que los estudiantes que adoptaron el enfoque basado en proyectos superaron el desempeño de sus compañeros que recibían instrucción en clases tradicionales, con estudiantes que pasaban de una C a una B-, o de una B+ a una consistente A, o en el caso de las pruebas estatales, de la deficiencia a la suficiencia. (Actualmente, el estudio está siendo evaluado por la revista Educational Research).

Cómo se implementa el aprendizaje basado en proyectos

En un día cualquiera (y dependiendo del progreso de los niños en sus proyectos), podrías ver estudiantes agrupados en pleno debate, investigando de forma independiente, realizando críticas constructivas o recibiéndolas, o todas las anteriores. El maestro podría estar al frente del salón explicando un concepto o habilidad fundamental para un grupo o para la clase en general, desplazándose por todo el salón ayudando a distintos grupos con sus proyectos, o sentándose en el escritorio, donde los niños pueden acercarse a hacer preguntas o pedir sugerencias.

“El ABP (Aprendizaje Basado en Proyectos) ayuda a los niños a entender el porqué de las cosas”, explica Krajcik, (enlace en inglés) investigador de la Universidad Estatal de Michigan e investigador principal de Interactions, (enlace en inglés) un currículo de ciencias que aplica el aprendizaje basado en proyectos y cuenta con el respaldo de la Fundación Nacional de Ciencias. “En lugar de estudiar la tabla periódica, exploran preguntas más simples, como ¿Por qué las cosas se adhieren? ¿Por qué un huracán tiene tanta energía? ¿Por qué es tan peligroso tener una temperatura de 107 grados? ¿Por qué podemos comer sal (cloruro de sodio), pero no podemos comer ni sodio ni cloruro?

No cualquier proyecto cumple con los estándares de un buen aprendizaje basado en proyectos. Bob Lenz, director ejecutivo de PBLWorks, (enlace en inglés) una organización sin fines de lucro que incentiva a las escuelas a implementar el aprendizaje basado en proyectos en todo el país, afirma que un proyecto de calidad debería ser intelectualmente desafiante, auténtico, debe relacionarse con el mundo más allá del ámbito educativo, ofrecer oportunidades a los estudiantes para que colaboren, tener una audiencia pública, poner en práctica habilidades de gestión de proyectos e incluir oportunidades para la reflexión.

Incluso con semejantes criterios, los proyectos pueden abarcar extensas áreas. Por ejemplo, los estudiantes de la Impact Academy of Arts and Technology en Hayward, California, crearon simulaciones de entre 6 y 8 minutos para su clase de historia universal, con el objetivo de evaluar qué tan efectivas fueron diversas revoluciones (enlace en inglés) (la francesa, la cubana, la rusa, la haitiana, etc.) para mejorar las condiciones de vida del pueblo. Los estudiantes de Susanna Pierce McConnell en Westlake High School en Austin, Texas, se centraron en la construcción de ciudades sustentables (enlace en inglés). Los estudiantes de matemáticas de Chris Fancher en Manor New Technology High School en Manor, Texas, trabajaron con la programación de videojuegos (enlace en inglés). Mike Lim, maestro de química en Gardena Senior High School al sur de California, se reía entre dientes mientras recordaba su proyecto favorito: ¿Por qué es imposible revertir el estado de un huevo cocido? La investigación demostró que “cada proyecto trae recompensas (habilidades y conocimientos adquiridos) que permiten que los estudiantes entiendan otros proyectos”.

¿Por qué no todas las escuelas adoptan el aprendizaje basado en proyectos?

La instrucción basada en proyectos exige habilidades distintas a las que se usan en las aulas de clase tradicionales. Los maestros necesitan ser “diestros al hacer preguntas”, explica Krajcik, al igual que apoyar a los estudiantes en su investigación, preparar a los niños para trabajar en equipo de forma eficiente, programar proyectos, incentivar la evaluación entre compañeros, supervisar tanto el progreso grupal como individual, determinar el aprendizaje estudiantil y evaluar los proyectos. El maestro de química Mike Lim describió su transición al aprendizaje basado en proyectos como “dos meses de agonía”. Hoy en día, el método le parece «completamente satisfactorio” y ayuda a los nuevos maestros a manejar la misma transición. La capacitación docente y la adopción del aprendizaje basado en proyectos en toda la escuela pueden exigir una gran inversión de tiempo y dinero.

Además, cuando no se ejecuta de forma adecuada, el aprendizaje basado en proyectos podría no ser efectivo para los estudiantes. De acuerdo con el escritor Terry Freedman, (enlace en inglés) algunas de las dificultades son proponer un tema enriquecedor, supervisar las actividades de cada estudiante y darles la oportunidad de ponerse al día cuando faltan a clases. Los escépticos sostienen que los adolescentes no podrán o no querrán trabajar en equipo, o que algunos acosarán u obligarán a los demás a hacer todo el trabajo. Otros critican el “pensamiento de grupo socialista” o se sienten alarmados ante la pérdida del método de instrucción más tradicional, el cual es dirigido por el maestro. Los investigadores sugieren que el aprendizaje basado en proyectos funciona mejor como enfoque de dos etapas. En cualquier asignatura, los maestros deberían enseñar primero el contenido de forma directa y, posteriormente, ofrecer el aprendizaje basado en proyectos como una forma de que los estudiantes analicen el material, alcancen un mayor nivel de comprensión y desarrollen habilidades.

¿Qué opinan los estudiantes? Aunque las investigaciones muestran actitudes y resultados generalmente favorables en los estudiantes, Duncan Haus, egresado de New Technology High School, una institución que aplicaba el enfoque basado en proyectos en Napa, California, opina que este enfoque de enseñanza “parece funcionar mejor en personas capaces de guiarse por sí mismas… no funcionaría bien en personas que prefieren aprender de memoria”. A pesar de ello, afirma Haus, la mayoría de sus compañeros prefería el aprendizaje basado en proyectos que el aprendizaje presencial tradicional. Sin embargo, Bob Lenz de PBLWorks, ofrece el siguiente punto de vista: “Todos los estudiantes sobresalen en el ABP. Los que experimentan dificultades en la escuela tradicional encuentran el éxito de inmediato”.

Cómo reconocer cuando el aprendizaje basado en proyectos se está ejecutando de forma eficaz

  • Implementación. Busca escuelas que hayan adoptado el aprendizaje basado en proyectos en toda la institución y que lo hayan implementado a largo plazo. ¿Durante cuánto tiempo ha usado la escuela el aprendizaje basado en proyectos? (Períodos más largos demuestran mayor compromiso). ¿El aprendizaje basado en proyectos se aplica en toda la escuela o solo en algunas clases? (Adoptarlo en toda la escuela no implica que esta no pueda aplicar también la enseñanza tradicional, pero adoptar el enfoque en toda la escuela implica más que realizar un solo proyecto para una cantidad reducida de clases o estudiantes). ¿Cómo logran los maestros equilibrar el tiempo dedicado a las clases y el tiempo dedicado a los proyectos? (Los mejores maestros pueden explicar cómo logran el equilibrio entre estos distintos enfoques).
  • Capacitación docente. Generalmente, los maestros necesitan capacitación exclusiva para adoptar este tipo de enseñanza. Pregunta quién está capacitado, cómo fue el proceso y cuándo ocurrió. ¿Es la capacitación docente un proceso en curso o fue un evento único?
  • Trabajo estudiantil. Las escuelas con un buen aprendizaje basado en proyectos se sienten orgullosas de los logros de sus estudiantes, y estos pueden hablar sin problemas sobre su trabajo. ¿Puedes ver ejemplos de presentaciones finales? ¿Qué miembros de la comunidad han participado en la evaluación de las presentaciones estudiantiles? ¿Qué opinan los estudiantes sobre su aprendizaje?

Conclusiones clave

Para los padres

  • Mira los siguientes videos (en inglés) sobre cómo se aplica el aprendizaje basado en proyectos en la escuela primaria, escuela intermedia y escuela secundaria, y determina si tu estudiante se vería beneficiado por este tipo de aprendizaje.
  • Pregunta cómo se implementa el aprendizaje basado en proyectos en el aula de clases y en la escuela en general.
  • Pide que te muestren ejemplos de presentaciones pasadas y proyectos terminados.

Para educadores

Aprende más sobre lo que es el aprendizaje basado en proyectos y lee algunas de las investigaciones que lo respaldan (enlaces en inglés).

Lee más sobre prácticas de enseñanza (enlace en inglés) asociadas a una sólida enseñanza basada en proyectos.

Para líderes educativos

  • Lee Project-based learning: A review of the literature (Aprendizaje basado en proyectos: una revisión de la literatura, enlace en inglés) de los investigadores de Durham University para repasar las investigaciones que respaldan el aprendizaje basado en proyectos y para obtener seis recomendaciones clave para la adopción exitosa del aprendizaje basado en proyectos.
  • Lee el capítulo “Aprendizaje basado en proyectos” de The Cambridge Handbook of the Learning Sciences (El Manual de Cambridge sobre las ciencias del aprendizaje).
  • Dale un vistazo a Interactions (enlace en inglés), un plan de estudios de ciencias usando el aprendizaje basado en proyectos respaldado por la Fundación Nacional de Ciencias.